La educación nacional

La falta de educación de la mayor parte de la población era uno de los principales problemas que afectaban a México al comenzar el siglo XX, porque sin educación se producían otros problemas que afectaban al conjunto de la sociedad. Sin ella las desigualdades no solo se mantenían, también se extendían de generación en generación.

La importancia de este problema y la urgencia de resolverlo llevaron a crear en 1921 la Secretaria de Educación Publica (SEP), que tuvo como misión organizar los recursos públicos para llevar la educación básica a todos los habitantes del país. Con estas medidas comenzó a funcionar un sistema educativo nacional.

En la década de 1930, bajo el lema de la “educación socialista”, se propuso convertir a la escuela, junto con los ejidos colectivos, en medios de la transformación social y el desarrollo económico del país. Ello supuso eliminar de la enseñanza contenidos religiosos y dar una educación científica para que los niños tomaran conciencia de que eran trabajadores de la patria ya gentes del cambio social.

En la década de 1940 continuo la enseñanza de las ciencias, la técnica y las artes, y se permitió la creación de escuelas privadas. No obstante se descuido la educación indígena y rural, así como la formación de maestros. Se pusieron en marcha reformas para resolver estos y otros problemas del sistema educativo y planear su desarrollo.

Como parte de estas reformas se cambiaron los planes de estudio de todos los niveles y se establecieron en 1959 los libros de texto gratuitos. Junto con la educación básica, la educación universitaria también vivió importantes cambios. A lo largo de las décadas de 1930 a 1970 se fundaron varias universidades públicas en estados como Nuevo León, Guadalajara, Puebla, Querétaro, Campeche, Hidalgo y San Luis Potosí, entre otros. En ellas se han formado profesionistas de diversas disciplinas que han contribuido con su trabajo al desarrollo económico y social del país.